Obispos de Bilbao consideran reforma de Ley del Aborto "retroceso en humanidad y civilización"

|

El Obispo de Bilbao, Mons. Ricardo Blázquez, y el prelado auxiliar, Mons. Carmelo Echenagusia, afirmaron que el proyecto de reforma de Ley del Aborto que plantea el Gobierno constituye "un retroceso en humanidad y civilización". Además, aseguraron que la interrupción del embarazo forma parte de "la cultura de muerte que degrada a la sociedad que lo practica y tolera".

En su homilía con motivo del "año dedicado a la oración por la vida", ambos afirman que iniciaron el presente ejercicio "con la intención de dedicarlo, de modo particular, a la oración por el don de la vida".

"En efecto, toda vida humana es un don inmerecido de Dios para la humanidad, que debe ser acogida con amor y respeto. Desde el momento de la concepción, en el seno de la madre se inicia la apasionante aventura de la vida humana; un nuevo ser creado a imagen y semejanza de Dios; un ser irrepetible, llamado a la comunión con Dios y con todos los hombres, con una dignidad inherente que debe ser reconocida y tutelada", aseguran.

Tanto Blázquez como Echenagusia aseguran que "la persona humana es siempre un bien" y que "el grado de humanización y grandeza de una sociedad, de una cultura, de una civilización, se mide principalmente por su capacidad de acoger y cuidar a todo ser humano con independencia de sus cualidades, capacidades físicas, estadio vital de desarrollo o utilidad".

"Por eso, el servicio y tutela de la vida constituye una de las tareas principales de quienes deben ser garantes y promotores del bien común, de modo particular, de las diversas instituciones sociales y los poderes del Estado", precisan.

Suscríbete a ACI Prensa

Recibe nuestras noticias más importantes por email.

Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram

Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos hoy:

Dona a ACI Prensa

Si decides ayudarnos, ten la certeza que te lo agradeceremos de corazón.