Obispos argentinos: Imiten a Santo Brochero y atiendan a Cristo a través del prójimo

El 16 de marzo, fiesta litúrgica de Santo Cura Brochero, patrono del clero argentino, la feligresía y devotos fueron alentados a imitar al santo y salir tras los intereses del prójimo, que son los "intereses de Cristo".

Desde el Salón de Descanso del Peregrino cercano al santuario dedicado al santo en Villa Brochero, Córdoba, se realizaron siete Misas para poder acoger a los peregrinos, siguiendo los protocolos sanitarios para evitar contagios por coronavirus.

En la Misa de las 8:30 p.m., el Obispo de Cruz del Eje, Mons. Ricardo Araya afirmó que la vida ministerial de Santo Cura Brochero se caracterizó por "el saliendo, andando, recorriendo, buscando y haciendo fiesta" porque "como buen pastor, Brochero fue capaz de vivir alegre, contento, con buen humor, con picardía serrana, con capacidad de encontrarle el lado lindo a las cosas".

"Un pastor capaz de ponerse contento y de llamar, de convidar a los amigos y festejar. Un cura que supo festejar, que festeja en la tierra, la alegría del Cielo", agregó.

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El Obispo destacó que Santo Cura Brochero "sabía bien dónde había una necesidad y sale a buscar, deja su propio interés, su yo, su ego. Va detrás de los intereses de Cristo Jesús. Eso mueve al cura, los intereses de Cristo, los intereses de todos", afirmó.

En ese sentido, Mons. Araya aseguró que "Brochero es un campeón en la capacidad de buscar juntos lo que hace bien a todos. Un maestro, siempre saliendo de sí, para andar por los caminos que lo llevan a los hermanos". "Brochero abrió caminos de vida, para nosotros, deja y va a buscar".

A su turno, el Obispo Castrense, Mons. Santiago Olivera, alentó a los capellanes a "imitar su celo misionero, su predicación evangélica y una vida pobre y entregada. Avivar ese celo, esa predicación y esa austeridad por el bien de nuestro pueblo y nuestra gente".

"Que podamos sentir y experimentar realmente el envío a servir a nuestra familia diocesana en las Fuerzas Armadas y en las Fuerzas Federales de Seguridad. Ellos entregan su vida en lo cotidiano y disponen el corazón para entregar verdaderamente la vida si fuera necesario por la defensa, por la patria, por el bien de todos".

"Nosotros somos ministros y también como nuestros fieles que nos moldean, debemos entregar nuestra propia vida", afirmó.

Mons. Olivera, que durante su ministerio episcopal impulsó la causa de canonización de Santo Cura Brochero, elevó sus plegarias para que el santo sacerdote les ayude a "ser creativos, a ser imaginativos, a trabajar en estos tiempos que nos tocan, en esta 'tormenta furiosa e inesperada' que es la pandemia que azota al mundo".

"No nos dejemos vencer, renovémonos anunciando el Evangelio con mucho entusiasmo, buscando caminos nuevos que serán fecundos para el gozo de vivir nuestro ministerio. Razón por la cual estamos: llevar a nuestros fieles a Jesús, que lo conozcan cada vez más y que se encuentren con Él a través de los sacramentos", concluyó.