Las Conferencias Episcopales de Francia y Alemania emitieron un comunicado con motivo de los 50 años del Tratado del Elíseo exhortando a la solidaridad y reconciliación para superar la crisis económica que golpea Europa.

El Tratado del Elíseo fue el acuerdo firmado el 22 de enero de 1963 entre el General Charles de Gaulle (Francia) y el Canciller Konrad Adenauer (Alemania), que selló la reconciliación entre ambas naciones enfrentadas en la Segunda Guerra Mundial. El 8 de julio de 1962, ambos líderes asistieron a una Misa de reconciliación en la catedral francesa de Reims.

Los obispos recordaron que “el Tratado del Elíseo era a la vez la cumbre de la reconciliación de las dos naciones enemigas y el punto de partida para la profundización de relaciones amistosas por medio de contactos políticos y sociales a todos los niveles. Como obispos, acogemos calurosamente todo cuanto se ha logrado en el marco del Tratado de amistad”.

Sin embargo, advirtieron que “hoy en día, la amistad franco-alemana parece obvia y ni los políticos ni los ciudadanos tienen ya la sensación de la naturaleza excepcional de estas relaciones. Y, sin embargo, la amistad entre nuestros países y pueblos es ahora más importante que nunca para superar la crisis actual y dar forma al futuro de Europa”.

“La crisis ha revelado comportamientos irresponsables en diversos ámbitos y ha puesto a dura prueba la solidaridad entre los países europeos. Solidaridad y responsabilidad deben estar más estrechamente relacionados de cara al futuro de Europa”, señalaron.

En ese sentido, advirtieron que la crisis económica ha hecho reaparecer “el desprecio y la desconfianza entre los pueblos de Europa, el rechazo a los extranjeros, la ausencia de solidaridad”.

Ante esto, los obispos dijeron que Francia y Alemania “pueden y deben recurrir a la historia de su reconciliación y su amistad para enfrentarse con las consecuencias de los problemas actuales”.

“También pueden inspirarse en ella para ayudar a la Unión Europea a establecer sólidas estructuras políticas a largo plazo y una genuina economía social de mercado. Deben actuar para que el respeto de la dignidad humana, el bien común y los principios de solidaridad y subsidiariedad guíen siempre la integración europea”, afirmaron.

Los obispos aseguraron que el 50 aniversario del Tratado del Elíseo brinda también a la Iglesia “la oportunidad de recordar, especialmente las generaciones más jóvenes, que la reconciliación no es una palabra vacía, sino un camino real”.