Después de los altercados registrados este domingo en San Sebastián al término de la manifestación prohibida de Batasuna, el Obispo de San Sebastián, Mons. Juan María Uriarte, censuró los actos violentos que dejaron un saldo de siete detenidos y una decena de heridos, a la vez que reiteró su llamado a la paz y la reconciliación.
“Nadie tiene derecho a entorpecer y obstaculizar el disfrute y el descanso de las fiestas”, dijo el Prelado en lengua euskera, aunque sin citar a nadie expresamente, durante la Misa de la Asunción de María. Asimismo, pidió a Dios que para las fiestas del próximo año “conozcamos la paz” en el País Vasco.
“Durante el año hay tiempo para todo, para trabajar y descansar, para reivindicar los derechos, para llorar y reír, para asumir responsabilidades y desprenderse de ellas, para mostrar y ocultar las diferencias”, dijo el Prelado en su homilía tras la manifestación convocada por la ilegalizada agrupación por sus vínculos con la banda terrorista Euzkadi Ta Azkatasuna (ETA) y que tuvo lugar en la Parte Vieja de la ciudad.