El Obispo de Ciudad Juárez, Mons. Renato Ascencio León, hizo un llamado a los homicidas de la niña Airis Enríquez Pando para que se entreguen a la policía, a la vez que se ofreció como mediador para garantizar que sus vidas serán respetadas.
Tras la Misa celebrada por el eterno descanso de la menor, el Prelado afirmó que “los criminales deben reconocer la maldad que han cometido” y “purgar la pena que corresponda”.
Mons. Ascencio lamentó este tipo de hechos que hacen creer que el mundo ha “abandonado al mismo Dios”. Añadió que crímenes como el ocurrido “ponen en tela de juicio el mismo Estado de Derecho”.