El Obispo Auxiliar de Lima, Mons. José Antonio Eguren, recordó las profundas raíces católicas de la capital, al presidir una Misa y Te Deum en la Basílica Catedral por el 470º aniversario de la fundación de la ciudad.
“Lima y la Iglesia en esta ciudad son una sola porque desde que la Iglesia se implantó en este lugar tuvo como tarea urgente y primordial atender el cuerpo y espíritu de la población”, explicó el Obispo.
Durante la Eucaristía, a la que asistieron el alcalde de Lima, Luis Castañeda Lossio y otras autoridades políticas y militares, el Prelado explicó que la atención corporal en estos cuatro siglos se refleja en la preocupación de la Iglesia por atender la dimensión física y espiritual de la ciudad de Lima.