El Obispo de Granada, Mons. Jorge Solórzano, pidió evitar un “estallido social” en el municipio del Boaco, luego que el alcalde local, Hugo Barquero, fuera destituido por concejales sandinistas y un liberal, y dividiera a la población.
En conferencia de prensa, el Prelado recordó a los políticos que, “más que adversarios por ideologías e intereses de partidos, todos somos hijos de Dios y conciudadanos de una nación”.
Según la prensa local, el Obispo dijo que lo sucedido en Boaco constituye un gravísimo daño al Estado de Derecho y a la institucionalidad del país y que remover a una autoridad elegida legítimamente por el pueblo es una responsabilidad muy grave. Indicó que las acusaciones contra Barquero deben ser analizadas dentro del debido proceso.