Mons. Francisco Javier Acero, Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis Primada de México, expresó la profunda preocupación de la Iglesia por las "oleadas de migrantes" que cruzan el país y advirtió que los que más sufren son "los menores no acompañados".
En diálogo con ACI Prensa, Mons. Acero manifestó que, frente a la complejidad del drama de los migrantes, "ahí estamos como Iglesia acompañándolos".
Entre estos esfuerzos destaca el de las hermanas Josefinas, que tienen a su cargo la Casa de Acogida, Formación y Empoderamiento para Mujeres y Familias Migrantes y Refugiadas (CAFEMIN). El obispo resaltó la "encomiable labor de la hermana Magdalena" y de toda la comunidad, que reciben a los menores migrantes solos y cuidan de ellos.