El Obispo de Río Gallegos (Argentina), Mons. Juan Carlos Romanín, condenó el ataque de miembros de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA), contra un grupo de maestros que el martes marchaban por las localidades de Río Turbio y 28 de Noviembre exigiendo mejoras salariales.
En un comunicado publicado hoy miércoles, el Obispo reiteró que "la violencia no es el camino, ni la opción". "Nuestra vida social sigue siendo fracturada; una vez más, se apela a la violencia como único lenguaje; ¿es que no hemos aprendido nada de nuestra historia?", preguntó.
Mons. Romanín dijo que este ataque es "un signo de intolerancia inadmisible e incomprensible" y recordó que "el gobierno debe garantizar y respetar a toda la comunidad y a cada uno de sus integrantes el derecho a manifestarse".