El Obispo de San Isidro y Presidente de Cáritas Argentina, Mons. Jorge Casaretto, pidió a los ciudadanos “no quedarse de brazos cruzados frente a la crisis social” que se traduce en una difundida pobreza y profunda tristeza de los más necesitados.
“Son muchas las personas que no sólo padecen la carencia material, sino una profunda tristeza, ya que sienten que ni ellos, ni sus hijos, ni sus nietos podrán salir de la situación de pobreza estructural en la que se encuentran”, explicó el Obispo.
En su habitual columna publicada por el periódico Huellas de Esperanza, Mons. Casaretto denuncia que “en los centros de apoyo escolar es cada vez más frecuente encontrar adolescentes y jóvenes analfabetos funcionales que no pueden afrontar los requisitos mínimos del mundo del trabajo o el estudio medio”.