El Nuncio Apostólico en Siria, Mons. Mario Zenari, hizo un especial llamado a los líderes religiosos de ese país de Medio Oriente, para que de forma unánime soliciten el fin de la violencia en la guerra interna que desangra al país.
El Nuncio se refirió a los constantes llamados del Papa Benedicto XVI, incluido el realizado ayer, en el que alentó a la comunidad internacional a colaborar "para que se detenga toda violencia y derramamiento de sangre".
El Santo Padre dijo también que sigue con atención lo que sucede en Siria "con la triste sucesión de muertos y heridos, también entre los civiles, y un enorme número de desplazados y de refugiados en los países limítrofes", por lo que solicitó además "se garantice la necesaria asistencia humanitaria y la ayuda solidaria".