El Nuncio Apostólico en Haití, Mons. Bernardito Auza, señaló que a dos años del terremoto que devastó el país, la reconstrucción todavía es difícil y una muestra es que aún 600.000 personas viven en tiendas de campaña, entre los que hay seminaristas mayores.
"La recuperación de un desastre natural es siempre difícil, y aún más difícil es reconstruir después de un desastre mayor como el terremoto en Haití del 12 de enero de 2010", declaró el Prelado a la agencia Fides.
Mons. Auza dijo que entre las dificultades está que no hay una institución que dirija los esfuerzos, pues el 21 de octubre expiró el mandato de la Comisión para la reconstrucción de Haití.