Su Beatitud Isaac Ibrahim Sidrak, nuevo Patriarca de Alejandría de los coptos católicos (Egipto), expresó su deseo de trabajar por la reconciliación del país junto al líder copto ortodoxo, el Papa Tawadros.

En declaraciones a la agencia Fides, el Patriarca dijo que con “los demás Obispos del Sínodo hemos visto juntos las preocupaciones que este tiempo confuso pone ante los cristianos y ante todo el país. Hay incertidumbre, hay miedo. Todo el mundo se pregunta: ¿qué será de nosotros mañana? Quizás hoy nuestra primera tarea consiste en tranquilizar, reconciliar. La palabra clave es reconciliación”.

En ese sentido, destacó las nuevas perspectivas de cooperación que parecen abrirse con la Iglesia copta ortodoxa. “La elección de Tawadros como nuevo Papa de la Iglesia copta Ortodoxa es una señal fuerte que el Señor nos ha dado para invitar a los cristianos a la unidad. Sus primeros gestos, sus visitas, su sensibilidad espiritual, suscitan una gran esperanza. De las palabras se pasará a los hechos, y esto nos ayudará a hacer frente a la confusa situación a la que nos enfrentamos”.

Asimismo, Su Beatitud Sidrak expresó su desacuerdo con la descripción de Egipto como un país donde los cristianos no pueden vivir bien. Sin embargo, reconoció que existen influencias negativas importadas de Arabia y países del Golfo que pueden distorsionar el rostro tradicional del Islam en Egipto.

“De estas infiltraciones tienen miedo no sólo los cristianos, sino también muchos musulmanes. Reconforta ver que muchos jóvenes y personas con juicio recto están reaccionando a todo esto”, indicó.

Dijo que un ejemplo fue lo que sucedió en Navidad. “Este año, algunos predicadores islamistas habían dicho que es pecado felicitar a los cristianos en la solemnidad natalicia. Yo imaginaba que después de esa advertencia, ningún musulmán vendría a las tradicionales visitas de homenaje. En cambio, vinieron más que en años anteriores. Grupos de jóvenes, familias, asociaciones islámicas, se presentaron incluso en la misa de Navidad. Querían mostrar que esta era su respuesta”, relató.

El líder copto católico pidió a los fieles no caer en una actitud sectaria que los aleje de los musulmanes porque “se pierde la libertad y apertura que caracteriza a los discípulos de Cristo, que no tienen miedo de perder su fe por culpa de los demás. Mi lema como Obispo de Minya, eran las palabras de San Pablo: 'Donde está el Espíritu del Señor, allí hay libertad'”.