Catholic Health Services (CHS) de Long Island (Nueva York), un sistema integral de salud católico sin fines de lucro, participa en dos ensayos de la Clínica Mayo diseñados para desarrollar tratamientos para el nuevo coronavirus COVID-19.
"Nuestros equipos clínicos han pasado varias semanas atendiendo a pacientes con COVID-19. Significa mucho para todos participar en estos dos esfuerzos de investigación de vanguardia", dijo Jason Golbin, vicepresidente senior y director de Calidad de CHS, en un comunicado del 15 de abril.
El primero de los ensayos involucra tratamientos con plasma de personas convalecientes, tomado de la sangre de personas que recibieron COVID-19 y se recuperaron. Esa prueba se lleva a cabo en los seis hospitales de CHS.