21 de febrero de 2006 / 07:06 PM
El Arzobispo de Pamplona, Mons. Fernando Sebastián, afirmó que la nueva Ley de Técnicas de Reproducción Humana Asistida es “cruel, discriminatoria y totalitaria”, porque juega con la dignidad de los embriones y reduce a “la condición de cobayas humanas” a los que serán usados para experimentación.
El Prelado llamó a poner fin a las ambigüedades y reconocer que el embrión es “un ser nuevo, que tiene en sí unidad, proyecto genético y dinamismo vital”; y no “un simple grupo de células, como dice la ley”.
Mons. Sebastián indicó que sólo reconociendo su dignidad se evitará que el ser humano sea manipulado en su estadío embrionario. Sin embargo, lamentó que las autoridades se hayan tomado la potestad de decidir “sobre la vida y la muerte de miles de seres humanos”.