El Papa Francisco se ha encontrado hoy, en la Sala Clementina del Palacio Apostólico Vaticano, con los reclutas de la Guardia Suiza Pontificia que mañana harán su juramento, acompañados por sus padres, familiares y amigos.
"Es un día especial -ha dicho- porque se conmemora el saqueo de Roma y el acto heroico de vuestros predecesores que, en 1527, dieron su vida por la defensa de la Iglesia y del Papa. Vuestra dedicación es la confirmación de que su valor y su fidelidad han dado sus frutos''.
''El contexto social y eclesial ha cambiado mucho desde entonces: la sociedad es diferente respecto a esos días. Pero el corazón del hombre, su capacidad de ser fiel y valiente -acriter et fideliter, como dice vuestro lema- se ha mantenido igual. Servir en la Guardia Suiza Pontificia significa vivir una experiencia que prevé encontrarse con el tiempo y el espacio de una manera muy especial"