Unos veinte niños de las escuelas primarias de la localidad japonesa de Ofunato, afectada por la radiación emitida por la central nuclear de Fukushima luego del terremoto y tsunami del 11 de marzo, prometieron al Papa Benedicto XVI que "no se rendirán nunca" ante las adversidades.
Según informa el diario vaticano L’Osservatore Romano, los pequeños se encontraron con el Papa al finalizar la audiencia general de este miércoles en la residencia pontificia de Castel Gandolfo.
Los niños expresaron al Pontífice su voluntad "de vivir y renacer" así como su esfuerzo para "reconstruir la ciudad todavía bella" y ofrecieron "no perder la sonrisa que es fuente de esperanza".