En un reciente artículo publicado en L'Osservatore Romano, el experto neonatólogo, profesor de la Universidad de Siena y miembro de la Pontificia Academia para la Vida, Dr. Carlo Bellieni, señaló al alertar de los riesgos de la fecundación in vitro para los niños concebidos con este procedimiento, "que ninguna persona es un derecho para otra".
El Dr. Bellieni indicó que hasta hace poco la fecundación in vitro estaba "limitado a la licitud moral de la fecundación extracorporal y a la eliminación de embriones humanos supernumerarios o enfermos" pero eso iría cambiando con estudios como el de "Human Reproduction, de noviembre de 2008" que "da a conocer que los niños luego de la fecundación in vitro (FIV) tienen un mayor riesgo de tener ciertas malformaciones".
Seguidamente precisa que este problema ya había sido alertado en 2003 por la garante para la infancia del parlamento francés, Claire Brisset, en "L'Express" del 16 de enero; y luego por Didier Sicard en la misma revista cuando señalaba que "hoy se sacraliza el deseo de los adultos. Ciertas técnicas de fecundación hacen correr riesgos a los niños que nacerán de ellas".