25 de septiembre de 2007 / 03:55 AM
El Arzobispo de Corrientes (Argentina), Mons. Domingo Salvador Castagna, aseguró que “pocos se atreven a denunciar situaciones y comportamientos contrarios a la moral sostenida por los antepasados” por eso es “preciso que surjan generaciones dispuestas a la virtud y al trabajo solidario”.
“Para ello se requiere dejar atrás los planes egocéntricos y proyectar el futuro personal al servicio humilde de la comunidad”, indicó.
“Acaso ¿no existen valores permanentes? ¿Lo que ayer fue bueno es ahora malo? ¿La verdad que animó la conducta y el sacrificio de los próceres, es ahora mentira y mojigatería?”, cuestionó el Prelado y agregó que “habrá que remar contra la corriente y tener el valor de contrarrestar la corrupción instalada abiertamente en la sociedad llamada 'moderna y progresista’”.