Un religioso salvadoreño miembro de la Congregación de los Hermanos Maristas murió asesinado por pandilleros mientras que su hermano resultó herido en un ataque con arma de fuego en la capital guatemalteca el domingo por la tarde.
Los dos religiosos habían acudido a un centro cultural ubicado al sur de la ciudad y caminaban de regreso a un colegio en donde celebraban 75 años de la llegada de la Congregación Marista a Guatemala.
Cuando los dos eran asaltados en la calle por un grupo de delincuentes miembros de una "mara" (pandilla), un auto se acercó y empezó a dispararle a los asaltantes, quienes respondieron al fuego. En el intercambio de disparos, perdió la vida el hermano Marista salvadoreño Enrique Alberto Olano Merino, de 29 años, mientras su hermano Francisco Javier resultó con una herida en la mano.