El Obispo de Palencia, Mons. José Ignacio Munilla Aguirre, felicitó la aprobación en las Naciones Unidas de una moratoria –aunque no vinculante–, a la pena de muerte; pero señaló que una muestra de coherencia moral sería también establecer una moratoria al aborto, porque así como se pide el respeto a la vida de un delincuente, con mayor razón se debe respetar la vida de un inocente.
A través de una carta, el Prelado se refirió a la campaña liderada por la delegación italiana ante el Foro de las Naciones Unidas para lograr una moratoria a la pena de muerte; campaña puesta en marcha por asociaciones laicas y religiosas bajo el lema "Que nadie toque a Caín", y que fue respaldada por la Santa Sede.
"El éxito de la campaña italiana, culminada con la aprobación de la moratoria de la ONU, ha motivado que el diario italiano Il Foglio, se atreva a proponer otra campaña a favor de una segunda moratoria: el aborto. Si consideramos un valor moral el respeto de la vida de Caín, aunque éste sea culpable del delito de sangre, ¡cuánto más habrá que respetar la vida de Abel, la del inocente no nacido!", expresó el Obispo de Palencia.