El Arzobispo de Miami (Estados Unidos), Mons. Thomas Wenski, defendió a la Iglesia en Cuba de los que la acusan de supuestamente no apoyar a la disidencia, al señalar que ella debe ser cautelosa en su accionar.
En declaraciones recogidas por El Nuevo Herald, el Prelado explicó que "históricamente, la Iglesia no adoptó a todos los disidentes porque no hubiera podido saber quiénes eran realmente disidentes y quiénes eran infiltrados" del régimen comunista.
"La Iglesia ha tomado riesgos. A veces ha sido criticada por tomar riesgos y otras veces por no tomar riesgos (…). "Pero debe ser cautelosa porque no puede saber realmente si alguien es disidente o infiltrado", advirtió.