El Arzobispo de Los Ángeles (Estados Unidos), Mons. José Gómez, exhortó a los fieles a promover una catequesis y educación religiosa que inspiren a las personas a "una práctica más intensa de la fe", viviéndola "más plenamente, con más amor y devoción".

"¡Nuestra fe es hermosa! Hay riquezas en nuestra fe católica que abarcan toda la vida - desde nuestras conversaciones privadas con Dios en la oración, hasta nuestra participación en la sociedad", afirmó en su última carta enviada a ACI Prensa.

El Arzobispo expresó su preocupación por un cierto "catolicismo cultural", en el que las personas van a la iglesia los domingos "sin entender realmente por qué van o qué están haciendo. Me preocupa que las personas no entiendan de verdad la relación entre lo que creemos y cómo debemos vivir".

El Prelado explicó que la educación en la fe no se limita al conocimiento en sí mismo, sino que significa "conocer a Jesucristo". "Nuestra fe debe hacer toda la diferencia en nuestras vidas. Y ese debe ser el objetivo de toda catequesis y educación religiosa: cambiar las vidas de las personas, poniéndolas en contacto con el amor de Jesucristo y la verdad de su Evangelio", afirmó.

En ese sentido, invitó a reflexionar sobre el legado del Papa Benedicto XVI de cara al Congreso de Educación Religiosa que se celebrará del 21 al 24 de febrero, pues el Santo Padre "es una de las personas más sabias en el mundo de hoy" y "será recordado como uno de los grandes maestros de la fe en la Iglesia".

"En sus discursos, homilías y escritos, vemos que este Papa entiende el mundo de una manera muy profunda - desde la economía, la política y los asuntos mundiales, hasta los problemas espirituales y morales que cada individuo enfrenta", indicó.

Además, junto a sus catequesis, audiencias, mensajes y homilías, "durante sus ocho cortos años como Papa, él ha escrito Jesús de Nazaret, una importante obra en tres volúmenes sobre cómo leer los Evangelios para encontrar el verdadero rostro de Cristo. Posiblemente esta sea una de las obras más importantes de la teología bíblica de nuestro tiempo".

Mons. Gómez, que recibió el Palio Arzobispal de manos de Benedicto XVI en dos ocasiones – como Arzobispo de San Antonio y de Los Ángeles-, expresó su afecto especial por el Santo Padre. "Él es una persona muy especial", afirmó.

Por ello, afirmó que el acto del Papa de renunciar al pontificado ha sido "un hermoso acto de humildad y amor por la Iglesia, virtudes de un verdadero discípulo de Cristo. Es el acto de un santo".

El Arzobispo aseguró que Benedicto XVI "ha sido un verdadero Santo Padre para la familia de Dios, su Iglesia católica". Su renuncia, afirmó, "es un acto de alguien que no piensa solo en sí mismo, sino en la voluntad de Dios y en el bien de su pueblo. Que todos podamos alcanzar la gracia de ser así de humildes y entregados en nuestros ministerios y responsabilidades diarias".

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