Misionero contesta a sacerdote que hace apología del “matrimonio gay” en Chile

Misionero contesta a sacerdote que hace apología del “matrimonio gay” en Chile
P. Felipe Berríos (Imagen captura de pantalla Youtube)

El P. Ricardo Cáceres Lamas, un misionero que ha servido en Mozambique entre 1997 y 2013, le contestó al polémico sacerdote jesuita Felipe Berríos, ex capellán de la organización Un Techo para Chile, que causó polémica esta semana al defender en un programa de televisión el "matrimonio homosexual", reducir la defensa de la vida a un asunto de opinión y criticar la canonización de San Juan Pablo II.

Tras cuatro años en África, Berríos regresó al país y se presentó en el programa El Informante de Televisión Nacional (TVN), donde ofreció una extensa entrevista en la que arremetió una vez más contra las enseñanzas de la Iglesia. Hace un año, el superior de los jesuitas en Chile se disculpó con los obispos del país por similares declaraciones del sacerdote.

El P. Cáceres decidió contestarle al jesuita con una carta titulada "Resonancia a Entrevista en televisión del P. Felipe Berríos", publicada en el sitio web de la Conferencia Episcopal Chilena.

A continuación el texto íntegro publicado en http://www.iglesia.cl/cartas/carta.php?idc=947

A partir de la entrevista dada en televisión por el P. Berríos, me nace expresar lo siguiente, porque inició hablando de África (mi segundo hogar). Aún cuando hay contenidos que son verdad en su entrevista, también debe existir la forma de dar a conocer esos contenidos, que puedan producir unidad y no divisiones.

Hay varios chilenos trabajando en África hace muchos años. Ellos no necesitan de entrevista... hacen lo que deben hacer por vocación, en el silencio y sin tanta publicidad... Varios han vivido situaciones difíciles y trabajan por los más pobres... El silencio es su mayor fuerza de testimonio...Yo he trabajado 16 años en África... Por ahora he regresado (Dic 2013), y aprendí entre muchas cosas, que la humildad es el mayor testimonio que se puede dar...

Más en Controversias

No tuve esas posibilidades económicas como tú desde Chile de tus amigos y empresarios... Tampoco no fue necesario para hacer el bien de muchas maneras (la palabra y el testimonio). No creo necesitar y gritar a los cuatro vientos todo lo que hice.

Recuerda de compartir también aquello que no pudiste hacer, o lo que deberías haber hecho por los otros en ese continente. Llévalo contigo en tu corazón y esa experiencia que recibiste, aplícala en tu diario vivir, con respeto a todos. Recuerda que hay un padre chileno que trabajó y vivió en Ruanda más de 15 años en tiempos del genocidio, fue perseguido, le mataron a sus alumnos, y trabajó con refugiados en Burundi, pasando muchos momentos difíciles... nadie lo entrevistó... él vive y trabaja en silencio en un lugar de Chile... y así tantos...

Berríos, si amas a la Iglesia defiéndela y trata a todos con respeto y cariño. No somos dueños de la verdad... Y seguramente habrás aprendido en África, en esos poquitos años, que se debe observar, escuchar y hablar con respeto y con calma para poder insertarte en la cultura...

Trata bien tanto a los ricos como a los pobres, a los que piensan distinto, a los que entiende de manera diversa y aquellos que todavía están en camino de comprender. Ama a tu Chile y ama a tu Iglesia. No desacredites a nadie, aunque aquellos estén en el error... La caridad por sobre todo...

No somos salvadores en África y de ningún sistema, político, religioso, económico, etc., somos curas al servicio de la Iglesia y del mundo, especialmente de los más pobres, y con mucha humildad...

P. Ricardo Cáceres Lamas

Recibe las principales noticias de ACI Prensa por WhatsApp y Telegram

Cada vez es más difícil ver noticias católicas en las redes sociales. Suscríbete a nuestros canales gratuitos y recibirás las noticias más relevantes para tu vida de fe.

Misionero en Mozambique, 1997- Dic 2013

Suscríbete a ACI Prensa

Recibe nuestras noticias más importantes por email.

Dona a ACI Prensa

Si decides ayudarnos, ten la certeza que te lo agradeceremos de corazón.