12 de mayo de 2004 / 01:32 PM
Aunque en distintas partes del mundo, los gobiernos insisten en que el progreso exige la reducción de la población, en Australia un ministro pidió públicamente a las parejas que tengan más hijos para resolver el grave problema demográfico que atraviesa el país.
El Ministro del Tesoro, Peter Costello, sorprendió a los periodistas cuando declaró que las parejas australianas tienen el deber de dar más hijos a su país e incluyó en su presupuesto federal conceder tres mil dólares australianos (1.760 euros) a las familias por cada bebé que nazca después de junio.
"Vayan a casa y cumplan esta noche con su deber patriótico", aseguró Costello, que ha contemplado un "paquete familiar" de 19.200 millones de dólares australianos (11.270 millones de euros) para que sean distribuidos en cinco años.