Más de tres mil personas se manifestaron ayer por la noche en la Plaza de los Santos Apóstoles ubicada en el centro esta capital "contra el éxodo y la persecución de los cristianos en Oriente Medio y por la libertad religiosa en el mundo", iniciativa lanzada por el Vice director del diario Corriere della Sera, el ensayista italiano de origen egipcio, Magdi Allam.
Mons. Leonardo Sandri, Prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, apoyó la manifestación y expresó su deseo de que tenga "resultados positivos para la Tierra Santa, para los cristianos de Irak e Irán, que no se vean obligados a huir de sus países". La marcha también contó con el apoyo de numerosos obispos italianos, entre ellos el Cardenal Camillo Ruini, ex Presidente del Episcopado y Vicario del Papa para la Diócesis de Roma.
Por su parte, el Obispo Auxiliar de Bagdad (Irak), Mons. Shlemon Warduni, indicó que "en nombre de todos los perseguidos por la fe les digo gracias. Les pedimos sensibilizar el mundo político, religioso y toda la opinión pública sobre la suerte de los cristianos perseguidos y que sigan haciéndolo en el futuro".