Miles de fieles y peregrinos se dieron cita este mediodía en la Plaza de San Pedro para rezar el Regina Coeli con el Papa Benedicto XVI, quien en sus palabras introductorias definió a la Virgen María como protagonista del inicio de la comunidad cristiana.
“Mayo pertenece siempre al Tiempo de Pascua, del desvelarse del misterio de Cristo en la luz de la Resurrección y de la fe pascual; es el tiempo de la espera del Espíritu Santo, que descendió con potencia sobre la Iglesia naciente en Pentecostés”, dijo el Pontífice.
Resaltando que este mes está dedicado por la Iglesia a la Virgen María, el Papa la definió como la “flor más bella de la creación, la ‘rosa’ surgida en la plenitud de los tiempos, cuando Dios, mandando a su Hijo, donó al mundo una nueva primavera”.