El Arzobispo de Nueva York (Estados Unidos), Cardenal Timothy Dolan, presidió ayer la Misa con la que concluyó el segundo día de actividades del Congreso Guadalupano que se realiza a los pies de la Virgen del Tepeyac, reflexionando sobre la perseverancia en la fe.
En su homilía, señala el SIAME, el Arzobispo y expresidente de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos, dijo que en medio de las tribulaciones y en espera de la segunda venida de Cristo, "el temor no es siempre el sentimiento que domina, sino, más bien, la fe, cuando reconocemos que, en ese día, no serán nuestros méritos los que sean decisivos, sino los méritos de Jesús, quien canceló nuestros pecados por su Cruz y resurrección".
El Purpurado reflexionó acerca del deseo de las personas de estar cerca de la Virgen María al final de la vida terrenal: "la queremos con nosotros a la hora de nuestra muerte; la queremos con nosotros en ese día del juicio… Una vez más, todo en esta vida se desvanecerá. Sin importar cuán bello, cuán fuerte, cuán poderoso, todo en esta vida, incluso el templo desaparecerá".