El diario oficial del Vaticano, L’Osservatore Romano, comparó a Rita Fedrizzi, integrante activa de un grupo católico mariano, con la querida y recientemente canonizada Santa Gianna Beretta Molla, por haberse negado a seguir un tratamiento que hubiera salvado su vida pero causado la muerte del bebé que llevaba en su seno.
Gianna Beretta murió en 1962 debido a un cáncer que la sorprendió cuando estaba embarazada de su cuarta hija. Médico de profesión, se negó a someterse al tratamiento que podría haberla curado pero le hubiese causado un aborto. Fue canonizada por el Papa Juan Pablo II en el año 2003 y se ha convertido en un símbolo para todos aquellos que defienden la vida de los no nacidos.
Al igual que la santa, Fedrizzi, de 41 años de edad, falleció luego de negarse a recibir el tratamiento para curar el cáncer que le diagnosticaron casi al mismo tiempo de resultar embarazada, porque le habría costado la vida de su hijo, a quien bautizó como Federico.