Lideresa pro-vida denuncia engaños del Partido Socialista en Portugal

La Presidenta de la Federación Portuguesa por la Vida (FPV), Isilda Pegado, denunció las mentiras del gobierno del Partido Socialista con las que ha venido engañando al pueblo luso, en conferencia de prensa en la que comentó el resultado del referéndum del pasado 11 de febrero que no despenalizó el aborto en el país.

Tras el resultado, que no favoreció los intereses abortistas del gobierno socialista que ya ha presentado un proyecto de ley para despenalizar este infanticidio, la también Vicepresidenta de Juristas Católicos (JC) explicó que el Partido de Gobierno "mintió por estrategia electoral".

Durante la campaña, los dirigentes del Partido Socialista garantizaron a los portugueses que "el aborto no sería liberalizado y, por eso, sería exigidos consejería y acompañamiento a las mujeres, fijados por la reglamentación de la ley".

Días después del referéndum, "las declaraciones del líder del PS negaron todo" eso. Alberto Martins reiteró la oposición de la mayoría socialista a la consejería obligatoria para las mujeres que pretenden someterse a un aborto hasta las diez semanas, por considerar que este mecanismo pondría en peligro "la libre decisión autónoma" de la mujer, dijo la Presidenta de la FPV.

Según Isilda Pegada, con estas afirmaciones, se confirma que el "aborto será totalmente libre hasta a las diez semanas y apenas por voluntad de la mujer". La alerta ahora está en la "contradicción de aquello que fue dicho por el PS y aquello que, 48 horas después, dicen a los portugueses", dijo.

Asimismo, denunció que ahora "el bien mayor, la salud de la madre y del hijo, está completamente desamparado". "¿Una mujer antes de hacerse un aborto se hará una ecografía? ¿verá esa ecografía? ¿Sabe las consecuencias físicas y psíquicas que éste acto va a tener en su cuerpo y en su vida?", cuestiona Isilda Pegado.

La ley portuguesa "no limita el número de abortos que las mujeres pueden hacer a pedido, por eso estamos frente a una ley que podrá ser una de las más liberales de Europa", dijo la lideresa.

Seguramente, los constitucionalistas tendrán "una palabra que decir sobre este asunto" porque "la pregunta en la escena política ha quedado apenas en la cuarta parte de los portugueses". Al hacer las cuentas, son tres de cada diez portugueses los que votaron a favor del aborto. "Dos votaron por el no y otros cinco no votaron", precisó Isilda Pegado.