Durante una conferencia de prensa realizada en un hotel cercano al Vaticano, el obispo Bernard Fellay, líder del cisma producido por el fallecido arzobispo Marcel Lefebvre y autodenominado “Fraternidad Sacerdotal San Pío X”, atacó los esfuerzos ecuménicos de la Iglesia y calificó como “estancado” el diálogo con la Santa Sede.
Fellay, superior general de la Fraternidad, presentó a la prensa una misiva dirigida a algunos cardenales de la Curia firmada por él y por los otros tres obispos excomulgados por haber sido ordenados por Lefebvre sin nombramiento pontificio, en el gesto que determinó el cisma de la “Fraternidad”.
La carta acompaña un documento de casi 50 páginas titulado “Del ecumenismo a la apostasía silenciosa, 25 años de pontificado”, en el que los cismáticos dicen evaluar el pontificado del Papa Juan Pablo II.