El Presidente del Movimiento Cristiano de Liberación y uno de los más conocidos líderes disidentes cubanos, Oswaldo Payá, aseguró al semanario Alba que lo más grave del régimen castrista fue la eliminación de la Navidad por 46 años.
"Castro eliminó la Navidad, porque la consideró una fiesta del cristianismo, la religión impuesta por los conquistadores. Perseguían a quien colocaba adornos o nacimientos. Lo consideraban ‘brujería’. La ‘independencia’ del 1 de enero de 1959, como ellos la califican, arrancó la Navidad y con ella la esperanza del pueblo cubano. No se pueden ni imaginar lo que es vivir 46 años sin Navidad", indicó.
La fiesta de la Navidad se pudo celebrar en Cuba solo después de la visita del Papa Juan Pablo II a la isla en 1998. "En mi familia siempre hemos decidido celebrar la Navidad a lo grande. En noviembre preparamos el Nacimiento y la saboreamos como regalo precioso. Para mí es el momento más feliz humana y espiritualmente hablando", señaló.