La líder izquierdista de las Madres de la Plaza de Mayo conocida por sus constantes y rabiosos ataques a la Iglesia Católica, Hebe de Bonafini, reconoció en una carta al Papa Francisco que "no sabía de su trabajo pastoral" y le expresó su deseo de unirse en la lucha contra la pobreza.
"Don Francisco, no sabía de su trabajo pastoral, sólo sabía que el máximo dirigente de la iglesia argentina habitaba en la catedral; esa catedral que cuando marchábamos y pasábamos por delante, le cantábamos: 'Ustedes se callaron cuando se los llevaron'. Hoy, ante mi sorpresa, escucho a muchos compañeros explicar de su entrega y trabajo en las villas" como entonces Arzobispo de Buenos Aires, reconoció De Bonafini que durante años criticó al entonces Cardenal Bergoglio hasta el hartazgo.
La lideresa argentina fue una de las activistas de las Madres de la Plaza de Mayo que en enero de 2008 profanaron la Catedral de Buenos Aires para ayunar en protesta por la falta de entrega de fondos estatales destinados a sus proyectos de viviendas populares en la capital argentina.