Leyes de natalidad no respetan vida humana, denuncia Presidente del Episcopado chileno

El Presidente de la Conferencia Episcopal Chilena (CECH), Mons. Alejandro Goic, señaló que las normas gubernamentales de natalidad no respetan la vida y que el problema de los embarazos adolescentes "amerita una discusión mucho más a fondo que un simple decreto y una política que no podemos compartir".

"Lamentamos que algo tan importante como las normas de regulación de la fertilidad las hayan hecho sólo organizaciones pro-aborto y antinatalistas", señaló el Prelado en entrevista con el diario El Mercurio. Recordó que el Comité Permanente de la CECH advirtió que "tal medida ‘recordaba políticas públicas de regímenes totalitarios que pretendían desde el Estado regular la vida íntima de las personas’".

El Presidente del Episcopado reafirmó que la Iglesia se opone a todo método que atente contra la vida y dijo que los obispos "también estamos preocupados por el embarazo adolescente", pero ello "amerita una discusión mucho más a fondo que un simple decreto y una política que no podemos compartir".

"Como sociedad tenemos que fortalecer la familia, que es donde se entregan los grandes valores y principios que marcan la vida. Muchas políticas públicas se hacen tratando de resolver los efectos, pero no resolviendo las causas que provocan los hechos", expresó.

Sobre la píldora del día siguiente, Mons. Goic dijo que al existir opiniones encontradas de científicos que sostienen que es abortiva y otros que dicen que no lo es, lo conveniente es optar por el principio de "en la duda, abstente".

Tras señalar que la píldora tampoco puede ser usada en casos de violación, el Prelado relató el caso de una religiosa de Bosnia que salió embarazada por esta causa y que decidió tener el hijo para criarlo y educarlo. "Hay que ser consecuente con los principios: en casos extremos no se puede cambiar un principio que es fundamental", explicó el también Obispo de Rancagua.

Asimismo, al preguntársele por las relaciones de la Iglesia con el Gobierno de Michelle Bachelet, Mons. Goic afirmó que "queremos tener las mejores relaciones con el Poder Ejecutivo, pero con la libertad de decir nuestro mensaje que, a veces, al gobierno de turno le gustará y otras veces no".

El Presidente de la CECH afirmó que "la Iglesia tiene un poder moral y ese poder es mayor cuanto más libre es de los poderes de este mundo. Nuestro poder está en la fuerza del Resucitado". El Prelado aprovechó para recordar a los católicos que participan de la política que tienen "que actuar coherentemente con su fe: no puede legislar nada que atente contra la vida humana".

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