En el ámbito canónico, continuaron los Legionarios de Cristo, "5 fallecieron sin ser juzgados, 15 fueron sancionados, 6 están en curso de ser juzgados, 3 están en investigación previa con restricciones cautelares, uno recibió la dispensa de ministerio sin juicio, y tres fueron denunciados cuando ya habían abandonado la Congregación".
De los 18 sacerdotes que cometieron abusos que permanecen como miembros de los Legionarios de Cristo "14 no tienen ministerio sacerdotal público; 4 tienen un ministerio restringido que excluye pastoral con menores (colegios, grupos juveniles, etc.). Además, cuentan con un plan de seguridad".
Este año se hicieron públicas una serie de denuncias de abusos de menores cometidos por el sacerdote legionario Fernando Martínez Suárez, reconocidos luego por la congregación. Los Legionarios de Cristo publicaron un informe criticado por la Conferencia del Episcopado Mexicano por no presentar "un acto concreto de justicia y reparación para las víctimas".
Las víctimas del P. Martínez Suárez, mujeres que fueron abusadas cuando tenían entre 6 y 11 años en la década de 1990, denunciaron además que el informe omitía mencionar a personajes que habrían sido cómplices del sacerdote, y apuntaron que persisten los encubrimientos en el seno de la congregación religiosa.