14 de julio de 2018 / 04:39 PM
El Arzobispo de Rouen, Mons. Dominique Lebrun, comentó las lecciones que considera deja el Mundial de Fútbol Rusia 2018, que este domingo llega a su fin cuando se enfrenten las selecciones de su natal Francia y Croacia.
"El deporte es un juego. No lo olvidemos nunca, pese a que en ese ambiente hay muchos profesionales y se gasta millones en este medio", resaltó el Arzobispo, quien durante 13 años fue árbitro en la liga francesa de fútbol.
En entrevista concedida a la agencia italiana SIR, Mons. Lebrun también resaltó que el fútbol "es un juego que involucra a personas en todo el mundo. Es una actividad de juego que pide que los jugadores lo den todo en el campo. Exige gratuidad. Puede parecer paradójico esto en un mundo donde hay un mercado del fútbol, pero esta gratuidad está inscrita en el deporte".