El Arzobispo de Valencia, Mons. Agustín García-Gasco, denunció el intento de "imponer el laicismo excluyente" como si se tratara de "una nueva religión estatal", reduciendo la expresión de la fe católica a la esfera de lo privado.
La agencia AVAN informó que en su carta "Caridad, laicidad y laicismo excluyente", el Prelado advirtió que se quiere "excluir a la religión y especialmente a la confesión católica de cualquier manifestación pública, negando el derecho de expresión y apartándola de cualquier diálogo".
Indicó que "la crítica continua de cualquier proposición que proceda de la Iglesia, (...) la eliminación de signos y símbolos religiosos, o la reducción de las creencias a la esfera íntima de la persona", son algunas "claves" que permiten "descubrir a quien, bajo la etiqueta de la laicidad", pretende imponer el ‘laicismo excluyente’".