4 de noviembre de 2004 / 10:22 AM
Durante una Misa en honor a los caídos por la patria, el Obispo Castrense, Mons. Antonio Baseotto, dijo que la verdad sobre la muerte y la verdad de fe en la resurrección “deben ser la piedra de toque para medir nuestra escala de valores”.
“Tener presente el fin de nuestros días es, sin duda, una expresión de sana sabiduría, que también nos enseñan los sencillos y pequeños”, dijo el Prelado a los feligreses reunidos en la Catedral Stella Maris.
Tras preguntar de qué le “vale al hombre ganar todo el mundo, si al final pierde su alma”, Mons. Baseotto señaló que muchas veces “nos vemos expuestos a sacrificar la conciencia para tener un ascenso, un puesto, un rédito económico o social más jugoso y ponderado”.