25 de mayo de 2007 / 05:57 PM
En una entrevista concedida al diario socialista italiano Repubblica, el Presidente emérito del Pontificio Consejo para los Textos Legislativos del Vaticano, Cardenal Julián Herranz, señaló que es falso que la Santa Sede oculte o proteja a sacerdotes culpables de abusos o inconductas sexuales, y, por el contrario, aclaró que los ministros pederastas reciben “penas gravísimas” al interior de la Iglesia, sin detrimento de un procedimiento penal en el fuero civil.
La entrevista giró en torno al documental de la BBC “Crímenes sexuales y el Vaticano”, una producción inglesa que a raíz de un documento interno de la Congregación para la Doctrina de la Fe que reafirma la inviolabilidad del secreto de confesión, dedujo arbitrariamente y con testimonios manipulados, que el Vaticano “protegía y ocultaba” a sacerdotes abusadores.
El Cardenal Herranz explicó a Repubblica' que la legislación canónica, por el contrario incluye “penas durísimas, las máximas que se le pueden infligir a un sacerdote”, ya que “el bien de los niños está en el corazón mismo de la Iglesia, tal y como estaba en el corazón de Jesucristo”.