En un amplio informe publicado el viernes, la comisión especial de Australia que investigó la pederastia en el país encontró serias fallas en la protección de niños del abuso cometido al interior de la Iglesia Católica y otras importantes instituciones.
La comisión recomendó el 15 de diciembre que los sacerdotes deberían estar legalmente obligados a revelar los detalles del abuso sexual que fueron narrados bajo el secreto de confesión y que el celibato sacerdotal debería ser opcional.
El Vaticano respondió diciendo que el informe debe ser "estudiado en serio", reiterando su compromiso de escuchar y acompañar a las víctimas de abuso sexual infantil en la búsqueda de curación y justicia.