Unos 30 mil peregrinos acudieron esta mañana a la Plaza de San Pedro para participar en la Audiencia General con el Papa Benedicto XVI, durante la cual recordó que "la Iglesia del amor es también la Iglesia de la Verdad, entendida ante todo como fidelidad al Evangelio confiado por el Señor Jesús a los suyos".
En la meditación titulada “El servicio a la comunión”, el Santo Padre resaltó que "el Espíritu, que infunde el amor de Dios en nuestros corazones, es fuente de comunión de los discípulos entre sí y con Dios" recordando la enseñanza de San Ireneo: "Donde está la Iglesia, está el Espíritu de Dios", "y donde está el Espíritu de Dios, está la Iglesia".
"Este lazo íntimo con el Espíritu –prosiguió el Papa– no anula nuestra humanidad con todas sus debilidades y así, la comunidad de los discípulos conoció muy bien esta prueba, constituida sobre todo de contrastes relativos a las verdades de la fe, que acarrearon divisiones en la comunión".