Según la tradición de la Iglesia, la Cruz de Caravaca es un "lignum crucis" o fragmento de la Vera Cruz, un trozo de madera y reliquia de primer orden perteneciente al madero en el que fue crucificado Jesucristo y encontrado por Santa Elena.
La ciudad de Caravaca de la Cruz, en Murcia (España), celebra desde el 8 de enero de 2017 un Año Jubilar. La ciudad recibió el 9 de enero de 1998 la concesión, por parte de la Santa Sede, de la celebración de un Año Jubilar a Perpetuidad cada siete años en torno a la devoción a la Vera Cruz.
El P. Pedro Ballester Lorca, capellán de la Real Basílica-Santuario de la Vera Cruz de Caravaca (España), explicó en un escrito publicado por la Universidad Católica de Murcia, que esta reliquia es conservada al interior del templo en un relicario en forma de cruz de doble brazo horizontal y uno vertical.