10 de febrero de 2017 / 08:13 AM
"En primer lugar está la inviolable dignidad de cada persona humana, desde el momento de su concepción hasta su último respiro", afirmó el Papa Francisco esta mañana en el Vaticano, en la audiencia a los participantes en el encuentro de la Comisión de Caridad y Salud de la Conferencia Episcopal Italiana.
En la Sala Clementina del Palacio Apostólico del Vaticano, el Santo Padre advirtió contra la cultura del descarte "que penaliza a los más débiles" y llamó a situar en el centro de la atención sanitaria a los enfermos y no a dejarlos en un segundo plano.
El Pontífice alabó la labor de tantos trabajadores sanitarios "que con sus manos tocan cada día la carne sufriente de Cristo, y eso es un gran honor y una gran responsabilidad".