El Obispo Auxiliar de Bagdad, Mons. Shlemon Warduni, recordó a Juan Pablo II como "un heraldo de paz que nunca ha dudado en gritar en contra de la guerra. Ha hecho todo lo posible para evitar los conflictos en todo el globo pero de modo especial recuerdo su esfuerzo por evitar las guerras en Irak, la de Irán, luego la del Golfo y por último la actual".
En declaraciones a la agencia italiana SIR, el Prelado destacó que "nadie entonces quería escuchar la palabra del Pontífice que decía que la guerra solo provoca mal y no resuelve nada. Y para entender lo que quería decir basta con caminar, hoy, por las calles de Kirkuk, Baghdad, Mossul. Allí solo hay destrucción".
"Recuerdo cuando mandó aquí a su representante, el Cardenal Roger Etchegaray, en el esfuerzo extremo por evitar la guerra. Los iraquíes todos recuerdan todavía los esfuerzos de este Papa bueno al que hoy le piden protección y su intercesión para obtener la paz", dijo el Prelado.