El Papa Juan Pablo II denunció que la llamada “salud reproductiva” -utilizada en ambientes internacionales para introducir el aborto como práctica médica- es un concepto que eleva la salud a mito “hasta suplantar o descuidar bienes superiores” como la vida de los niños por nacer.
El Santo Padre hizo esta reflexión en el mensaje que dirigió a Mons. Elio Sgreccia, presidente de la Pontificia Academia para la Vida, y a los participantes en el congreso de estudio sobre el tema "Calidad de vida y ética de la salud", que se celebra del 21 al 23 de febrero en el Vaticano.
"Ciertamente, la salud no es un bien absoluto, sobre todo cuando se entiende como simple bienestar físico, o se eleva a mito hasta suplantar o descuidar bienes superiores, alegando razones de salud hasta en el rechazo del ser que va a nacer: es lo que sucede con la llamada 'salud reproductiva'. ¿Cómo no reconocer en esto un concepto reductivo y desviado de la salud?", cuestionó el Pontífice.