“Dar su propia sangre voluntaria y gratuitamente es un gesto de elevado valor moral y cívico”, aseguró el Papa Juan Pablo II luego de rezar el Ángelus ante miles de peregrinos congregados en la Plaza de San Pedro.

Al recordar que mañana se celebra la Jornada Mundial de Donantes de Sangre, el Papa elogió el lema de este año, “Un regalo de vida” y pidió que “que los donantes, a quienes todos los deben su reconocimiento, se multipliquen en todas las partes del mundo”.