A través de una carta, el Papa Juan Pablo II “agradeció a Dios por el don de la vida” otorgado a Luigi Giussani, fundador de Comunión y Liberación, quien vivió “sin reservas” por testimoniar “la propia vocación sacerdotal” y estar “al servicio valiente de la Iglesia”.
Según la agencia ANSA, la carta fue leída durante los funerales de Mons. Giussani, presididos en nombre del Papa por el Cardenal Joseph Ratzinger, Prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, en la Catedral de Milán. El texto tiene fecha de hace dos días.
Juan Pablo II expresa en la misiva “su profunda emoción” por la muerte de Mons. Giussani, quien partió hacia la Casa del Padre “tras un largo período de enfermedad”.