El Cardenal Jorge Mario Bergoglio, Arzobispo de Buenos Aires, subrayó en una Eucaristía para los ancianos en la Catedral Metropolitana que "esta edad nuestra es para bendecir" e invitó a los ancianos a saciar la sed de esperanza de los jóvenes con "el silencio, el consejo y sobre todo con la bendición".
En la Misa organizada por la Red de Centros de Jubilados y Pensionados de la ciudad de Buenos Aires, el Purpurado recordó a los ancianos que "ustedes tienen la misión de iluminar el camino de los demás, inmersos en la violencia el odio y la envidia".
"Los mayores son como los vinos buenos, porque tienen el corazón añejo de sabiduría", agregó el Cardenal.