El Obispo de Córdoba, Mons. Juan José Asenjo, afirmó que "la fe sencilla y fervorosa de muchos inmigrantes latinoamericanos, y su apego a los valores auténticos que se están perdiendo entre nosotros, renueva y refresca nuestras parroquias, tal vez demasiado envejecidas y acomodadas".
El Prelado también destacó la gran riqueza y dinamismo que ellos "pueden aportar a nuestras celebraciones litúrgicas, a la catequesis, el apostolado y la acción social", y que ha comprobado en sus visitas a las parroquias.
Tras explicar que las parroquias deben ser "el primer espacio de acogida y encuentro de los jóvenes inmigrantes católicos con la Iglesia", el Obispo advirtió que "a menudo, vienen con una escasa formación y corren el riesgo de perder los mejores valores de su cultura, entre ellos los valores religiosos, mientras casi sin darse cuenta van incorporando a su modo de vivir los contravalores de nuestra sociedad hedonista y secularizada".