El pasado 23 de agosto se cumplieron 12 años de persecución religiosa que se desencadenó en el distrito de Khandamal, en el estado de Orissa (India) y que se saldó con más de 100 muertos y 50 mil desplazados.
Según recuerda Vatican News, era el 23 de agosto de 2008 cuando se desencadenó un ataque sin precedente contra los cristianos en el distrito de Kandhamal. Más de 100 personas fueron asesinadas, se destruyeron 395 edificios entre iglesias y lugares de culto y 6.500 casas particulares y de diversas instituciones educativas, sociales, sanitarias fueron devastadas y saqueadas. Más de 50 mil fieles dejaron el distrito y tuvieron que huir. Sus propiedades fueron ocupadas y secuestradas de manera abusiva.
En ese momento, el Papa Benedicto XVI lanzó un llamamiento en la audiencia general del 27 agosto de 2008 en el que condenaba "con firmeza cada ataque a la vida humana cuya sacralidad exige el respeto de todos, expreso mi cercanía espiritual y mi solidaridad a los hermanos y hermanas en la fe tan duramente probados".